¿Qué son los trastornos neurológicos funcionales?
¿Qué son los trastornos neurológicos funcionales? Los trastornos neurológicos funcionales son enfermedades que afectan al sistema nervioso y provocan síntomas que afectan a la capacidad de realizar las actividades cotidianas normales.
Pueden afectar a cualquier zona del cerebro y no hay una causa ni una cura claras. Pero con tratamiento y perseverancia, muchas personas con FNDs tienen la capacidad de llevar una vida más satisfactoria e independiente. A continuación se presentan algunas de las FND más comunes y su tratamiento.
¿Qué son los trastornos neurológicos funcionales y en qué consisten?
Los trastornos neurológicos funcionales (TNF) son un grupo de enfermedades crónicas que afectan al sistema nervioso. Se caracterizan por síntomas neurológicos que aparecen y desaparecen y que no responden bien a los tratamientos típicos de los trastornos neurológicos. Aunque no existen causas definitivas para las ENF, se cree que están relacionadas con el daño cerebral y la incapacidad de las regiones afectadas del cerebro para comunicarse entre sí de forma adecuada. Los síntomas pueden variar de una persona a otra, pero suelen incluir problemas de control y coordinación muscular, dificultad para pensar, recordar y desplazarse, dolores musculares, fatiga y debilidad. Aunque las FND pueden tratarse a veces con medicamentos, la mayoría de las personas con esta enfermedad acaban necesitando algún tipo de residencia asistida, en la que reciben cuidados las 24 horas del día por parte de un equipo de cuidadores que incluye fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y logopedas.
¿Qué son los trastornos neurológicos funcionales?
Los trastornos neurológicos funcionales (TNF) son un conjunto de afecciones que se han reconocido recientemente como un término general, que engloba lo que mucha gente solía llamar «trastorno de conversión». Este conjunto de afecciones se traduce en la presencia de síntomas neurológicos, como alteraciones de la sensibilidad, trastornos del movimiento, parálisis funcional o defectos del habla, que no pueden atribuirse a ninguna causa neurológica o médica conocida. Como resultado, este conjunto de afecciones se clasifica a menudo como «misterioso», «enigmático» e «inexplicable».
La ENF representa un grupo de síndromes clínicos que se presentan con síntomas neurológicos que no pueden explicarse por cambios estructurales observados en la exploración cerebral o anomalías en el electroencefalograma. Además, es importante señalar que la ENF no es un trastorno psiquiátrico, y que los síntomas neurológicos que experimentan los pacientes son reales, lo que conlleva una disminución de su calidad de vida y de su capacidad funcional. De hecho, dependiendo de cada caso, los síntomas pueden ser muy variables, como parálisis o debilidad funcional, posturas anormales, alteraciones sensoriales, temblor, alteración de la conciencia o defectos del habla. En algunos casos, estos síntomas pueden aparecer repentinamente tras un acontecimiento estresante o evolucionar poco a poco a lo largo de varios días o semanas.
¿Cómo se diagnostican y tratan los trastornos neurológicos funcionales?
Los trastornos neurológicos funcionales (fnd) están causados por daños en el sistema nervioso. Hay muchos tipos de fnd, pero los más comunes son los trastornos degenerativos, como las enfermedades de Parkinson y Alzheimer, y los tumores del sistema nervioso. Los fnd pueden diagnosticarse mediante diferentes pruebas, pero la mayoría de los médicos utilizan imágenes diagnósticas en el hospital, como la resonancia magnética cerebral y la PET. El tratamiento depende del tipo de fnd y de su gravedad, pero suele incluir medicación, cirugía y fisioterapia. En muchos casos, la fnd puede requerir también cuidados de apoyo, como atención domiciliaria o cuidados paliativos. Encontrar el tratamiento correcto para la fnd puede ser un reto, pero es importante recordar que la calidad de vida suele verse afectada más que la salud física cuando se diagnostica la fnd.
Para diagnosticar la ENF, los psiquiatras y neurólogos se basan en la presencia de patrones específicos de síntomas, así como en descartar cualquier otra causa neurológica. A menudo, ésta puede ser una tarea difícil debido a la amplia variación de los síntomas y a su complejidad. Las técnicas de tratamiento pueden variar en función de la sintomatología y las deficiencias que presenten, aunque los objetivos comunes son mejorar las características generales de los síntomas al tiempo que se ofrece apoyo psicosocial.
En muchos casos, la FND es un trastorno incapacitante que puede provocar deficiencias en actividades como el habla, la deglución y la movilidad. Las alteraciones del habla pueden incluir tartamudeo, mala pronunciación e incapacidad para mover la boca y la lengua adecuadamente para hablar (disartria). Los déficits de deglución pueden presentar dificultades para masticar y mantener el control de los alimentos en la boca (disfagia). La movilidad también puede verse afectada, dando lugar a torpeza, dificultad para mantener el equilibrio y controlar la postura (ataxia), temblores y parálisis funcional.
En general, la ENF es un complejo conjunto de afecciones cuyas causas subyacentes siguen siendo en gran medida desconocidas. Actualmente es uno de los temas médicos más estudiados por neurólogos y psiquiatras, que tratan de desarrollar una mejor comprensión y los tratamientos disponibles. Además, la FND destaca la importancia de los enfoques multidisciplinares, junto con el apoyo psicológico y psicosocial, para proporcionar una mejor calidad de vida a los afectados.
¿Cuáles son algunos de los trastornos neurológicos funcionales más comunes y cuáles son los síntomas de cada uno de ellos?
Los trastornos neurológicos funcionales (TNF) son un grupo de trastornos que afectan al cerebro y al sistema nervioso. Están causados por defectos o lesiones en el cerebro, más que por problemas en los propios nervios. Los trastornos neurológicos más comunes son el ictus, la demencia, la enfermedad de Parkinson y la esclerosis múltiple. Los síntomas de estos trastornos varían en función de la causa exacta y la gravedad del problema. Los síntomas más comunes son la dificultad para hablar o tragar, la dificultad para mover ciertas partes del cuerpo, la dificultad para pensar y recordar y los signos de demencia, como los cambios de personalidad o la irritabilidad. En la mayoría de los casos, las FND no causan inicialmente ningún síntoma. Sólo cuando el daño causado por el trastorno es lo suficientemente grave como para afectar al funcionamiento, surgen problemas más graves.
¿Cómo puede una persona con un trastorno neurológico funcional participar plenamente en su comunidad y sociedad?
Los trastornos neurológicos funcionales (TNF) se caracterizan por una alteración de una o varias de las cinco funciones principales del sistema nervioso: motoras, sensoriales, del pensamiento y del habla. Estos trastornos pueden causar una amplia gama de síntomas, desde problemas menores de coordinación y equilibrio hasta discapacidades graves que dificultan a la persona caminar o hablar. Debido a su complejidad, los FND pueden ser difíciles de diagnosticar y tratar. Pero, a pesar de ello, todavía hay esperanza para quienes viven con estas enfermedades. Con la ayuda de los profesionales de la medicina, los pacientes pueden alcanzar la independencia funcional y vivir una vida plena y vibrante. Entonces, ¿qué se necesita para apoyar a los enfermos de FND? En primer lugar, es necesario que haya un tratamiento especializado culturalmente adecuado. Esto significa que las personas con FND deben tener acceso a profesionales capacitados que puedan proporcionarles la ayuda que necesitan para manejar su condición y vivir una vida activa y satisfactoria. En segundo lugar, es necesario educar a las comunidades sobre la FND y las oportunidades disponibles para las personas con estas condiciones. Esto ayudará a las personas con FND a tener la confianza necesaria para participar en la sociedad en general. Por último, es necesario que se conozcan mejor los retos a los que se enfrentan las personas con FND. Esto significa que las escuelas, los lugares de trabajo y otras instituciones deben tomar medidas para asegurarse de que los empleados afectados por FND tengan el acceso que necesitan para apoyarles en sus esfuerzos por trabajar con éxito. Trabajando juntos como una comunidad, los afectados por FND pueden lograr una mayor salud y conectividad, a la vez que desarrollan la resiliencia y la curación en el proceso.
¿Cuáles son algunos de los recursos disponibles para las personas con un trastorno neurológico funcional en su comunidad o provincia/estado/país?
Si padece un trastorno neurológico funcional, puede ser difícil saber a dónde acudir en busca de ayuda. No hay muchos recursos disponibles en la mayoría de las comunidades, por lo que puede sentir que está solo. Sin embargo, hay algunos recursos que pueden ayudarle. El más importante es tu médico, que puede informarte sobre lo que hay en tu zona y hacerte recomendaciones en función de tus necesidades. Si no puede acudir a su médico, también puede ponerse en contacto con su clínica local de neurología o EP o con clínicas de oftalmología. Es posible que puedan remitirle a un especialista que le ayude a obtener un diagnóstico y a recibir el tratamiento adecuado. Por último, recuerde que hay muchas organizaciones que financian la investigación de todos los aspectos del trastorno neurológico funcional. Tanto si necesita ayuda para pagar los servicios médicos como si quiere participar en la investigación o simplemente quiere ayudar a los demás, hay muchos recursos a su disposición.